Un conflicto
humano es una situación en que dos o más individuos con intereses contrapuestos
entran en confrontación, oposición o emprenden acciones mutuamente
antagonistas, con el objetivo de neutralizar, dañar o eliminar a la parte
rival, incluso cuando tal confrontación sea verbal, para lograr así la
consecución de los objetivos que motivaron dicha confrontación. Por su
condición a menudo extrema o por lo menos conformacional en relación a
objetivos considerados de importancia o incluso urgencia (valores, estatus, poder,
recursos escasos) el conflicto genera problemas, tanto a los directamente
envueltos, como a otras personas. Se han avanzado muchas teorías acerca del
origen del conflicto. Últimamente se puede alegar que el hombre es un animal
social, y, por lo tanto, uno que responde a las tendencias tanto de competición
como cooperación que se observan en animales sociales. Así se aduce que hay
motivos últimamente biológicos o psicológicos para la agresividad.
Desde este punto de vista la idea más básica y desde la que habría que partir para poder llegar a resolver un conflicto social de manera adecuada es en la que el conflicto empieza con una emoción desbordada.
Otras visiones aducen que si bien podría haber tales causas inherentes o innatas, no es menos cierto que a menudo tal conflicto o violencia se expresa ya sea en formas socialmente permitidas o aceptadas o tiene como meta objetivos que son socialmente volubles. Como mínimo, el conflicto se expresa en un acto ejercido en relación a otros. Así, el conflicto no se puede entender o estudiar sino en un contexto social.
La cultura
de violencia es aquella en la cual la respuesta violenta ante los conflictos se
ve como algo natural, normal e incluso como la única manera viable de hacer
frente a los problemas y disputas que nos encontramos a diario. Por tanto,
podemos exponer que actualmente vivimos en una cultura de violencia. La
violencia es un comportamiento que ya debería haber desaparecido de toda
sociedad civilizada, pero que todavía sigue actuando entre nosotros como si
fuera el único medio para resolver los conflictos.
Se pueden remarcar varios motivos por los que vivimos en una cultura de violencia, entre ellos: el maltrato, la intolerancia, la falta de diálogo y el dejar que los conflictos se salden con violencia. En una cultura de violencia, los conflictos se gestionan a través de la violencia, siendo esta solo la consecuencia de un conflicto mal abordado, en una cultura de la paz, es a través del dialogo.
Debemos entender que agresividad es distinta de violencia. La agresividad, concepto muy relacionado con la asertividad, es innata y connatural al ser humano, es un mecanismo defensivo ante un peligro inminente, real o imaginario y hay que entenderla como algo positivo en cuanto nos permite tener identidad propia. A través de los medios de socialización, la agresividad se puede canalizar en tres tipos, la destructiva, que sería lo mismo a la violencia, la indiferencia, que sería la pasividad y la constructiva, la cual la entendemos como la positiva, que sería igual a la no-violencia, es decir, a actuar pero no violentamente. En cambio, la violencia, es aprendida, por tanto, puede ser desaprendida y reemplazada por otros mecanismos, no destructivos, de resolución de conflictos.
resúmelo en 20 palabras o menos xddd
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